En las comunidades indígenas de Guerrero no ha llegado el sistema de salud 

29 agosto, 2024

Tatyi savi

Así las cosas, termina un sexenio pero la muerte infantil no ha bajado, por lo menos en la regio Centro de Guerrero, donde cuatro niños murieron por falta de médicos y medicinas, mientras que una persona adulta corrió con la misma suerte

Por Kau Sirenio / X: @kausirenio 

El lunes 26, pobladores y comisarios municipales de comunidades nahua de los municipios de Chilapa, José Joaquín de Herrera, Mochitlán, y Quechultenango, protestaron en la puerta del palacio de gobierno de Guerrero, reclamando por el fallecimiento de cuatro menores por negligencia médica en un centro de salud en el municipio de Quechultenango.

De acuerdo con el corresponsal de La Jornada en Guerrero, Sergio Ocampo Arista, los inconformes son de los pueblos de Ahuexotitlán, El Epazote, Plan de Chilapa, Platanillos Tlalcorralco, Jocutla, Huxtlahuaca, Atlitenco, quienes pidieron una audiencia con la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, pero como ha pasado en otras ocaciones, los campesinos no fueron escuchados. 

Al lugar de la protesta llegó una familia con una niña en un ataúd. La bebé nació prematura y sus papás intentaron llevarla al hospital, pero murió en el camino. La causa de muerte, dicen los comisarios, fue la mala atención en el centro de salud. 

El padre de la menor denunció los malos tratos en los centros de salud de Quechultenango y el hospital de Chilapa. Dijo que la falta de medicina, y el constante cierre de estos centros de salud provoca la muerte de niñas y niños en la región Centro de Guerrero. 

“El afligido padre narró que sus gemelas nacieron de forma prematura, y que ayer acudieron al hospital de Quechultenango porque las niñas estaban muy débiles, pero que les negaron el servicio, y fue cuando una de las niñas perdido la vida, y la otra está en situación grave” escribió Ocampo Arista en La Jornada 

Por otro lado, los pobladores de la comunidad de Jocutla, municipio de Quechultenango, aseguraron que al menos tres menores han fallecido en esa zona por la mala atención médica.

En Tlalcorralco, municipio de Chilapa, falleció el comisario suplente, Faustino Mariano Gaspar, debido a que médicos del hospital de Chilapa se negaron atenderlo por falta de falta de medicamento. El comisario sólo se había caído de un caballo.

Con esto se evidencia que el programa IMSS-Bienestar no ha llegado para los indígenas y a los campesinos paupérrimos de la zonas rurales. La realidad en estas comunidades no refleja lo que reiteradamente ha señalado el Presidente Andrés Manuel López Obrador. 

En Guerrero, y otras regiones del país, los niños, mujeres y adultos mayores mueren de enfermedades curables porque no pueden acceder al servicio medico que, se supone, en México es un derecho humano. 

Las comunidades de la Montaña de Guerrero padecen ese infierno. La indolencia de los gobiernos de Guerrero también es evidente, pues no han resuelto el problema de carreteras y caminos que impiden a miles de personas llegar a un hospital más cercano para atender sus enfermedades. Todo esto, aunque presuman que hay caminos artesanales. 

Así las cosas, termina un sexenio, pero la muerte infantil no ha bajado. Pues, por lo menos, en la región Centro de Guerrero, cuatro niños murieron por falta de médicos y medicinas, mientras que una persona adulta corrió con la misma suerte. 

Ahora los guerrerenses tienen la tarea de reinventar su propio sistema de salud y también su organización comunitaria. Todo, para hacer frente a las problemáticas que padecen: desplazamiento forzado, muerte materna-infantil, inseguridad y falta de empleo. 

Periodista ñuu savi originario de la Costa Chica de Guerrero. Fue reportero del periódico El Sur de Acapulco y La Jornada Guerrero, locutor de programa bilingüe Tatyi Savi (voz de la lluvia) en Radio y Televisión de Guerrero y Radio Universidad Autónoma de Guerrero XEUAG en lengua tu’un savi. Actualmente es reportero del semanario Trinchera.