El uso de la lengua materna en el espacio público

21 febrero, 2023

Tatyi savi

Para que la lengua materna no caiga en el desuso, nosotros, los hablantes, tenemos que revelarnos ante el sistema opresor.

Por: Kau Sirenio

En México la discriminación institucional, jurídica y social profundizan el desuso de la lengua materna, porque los hablantes de lengua indígena no tienen acceso a servicios básico en hospitales, cárceles y establecimientos públicos por falta intérprete.

Mientras que la política educativa destinada a las poblaciones indígenas no es clara, ni propicia estrategias que permitan fortalecer la identidad lingüística en las 68 lenguas y variantes lingüísticas que se habla en el país.

Mientras que el acceso a la información y trámite de documentos de identidad es imposible para los hablantes, es por eso que prefieren que sus hijos no hablen su lengua materna.

Otro elemento que aísla a los hablantes de lengua materna es el acceso a los medios masivos de comunicación. Hasta ahora los contenidos se hacen en español, pero no informan nada sobre las comunidades indígenas, al contrario, desinforman y discriminan.

Con el incremento de la migración en los últimos años, las comunidades indígenas se despoblaron y la transmisión conocimientos científicos, culturales e históricos guardados durante más de 500 años dejaron de trasmitirse a través de los ancianos.

Esta situación pone en riesgo las lenguas y culturas que tienen íntima relación con la naturaleza y los pensamientos indígenas, pues se perderán para siempre. Es por eso que los hablantes debemos de hacer todo lo posible para fortalecer nuestra identidad cultural, porque si desaparecen, el mundo será un lugar más pobre.

Miguel León Portilla presagió: “La pérdida de una lengua y de su contexto cultural representa la quema de un libro de consulta único del mundo natural, en donde los secretos de la naturaleza, guardados en las canciones, las historias, el arte y las artes de los pueblos indígenas, podrían perderse para siempre como resultado de la creciente globalización y la discriminación institucional”.

Para que la lengua materna no caiga en el desuso, nosotros, los hablantes, tenemos que revelarnos ante el sistema opresor para que tu’un savi (lengua de la lluvia), el binizaa (zapoteco), el triqui o el náhuatl, y las otras lenguas florezcan en todo el mundo.

Porque si esto no ocurre, será muy difícil acabar con la frontera que separa los indígenas con los no indígenas, así como lo describió Guillermo Bonfil Batalla:  “El México imaginario con el México profundo”.

Porque los mexicanos desindianizados cargan sus prejuicios a cualquier espacio donde llegan: “Muchos mexicanos llegaron con su comida y su música, pero también trajeron sus prejuicios hacia los pueblos indígenas”, explicó Odilia Romero en una entrevista en Los Ángeles, California.

Afirmar que México es un país racista es lo menos que se puede endilgar a una sociedad clasista que adora a los indígenas muertos. Pero la gran mayoría tienen un prejuicio hacia las comunidades indígenas y reafirman cada que pueden: «No seas indio».

Pensar que los indígenas puedan transitar a la educación, justicia, salud, cultura, uso de su lengua en espacios públicos, es una utopía porque en vía de los hechos los que imponen la agenda son los medios de comunicación.

Entonces, ¿qué esperamos en esta celebración del Día Internacional de Lengua Materna? Cuando los primeros de esta nación, son los últimos en todos los renglones de la historia. Son los olvidados; los primeros en marginación y extrema pobreza material; pero no espiritual y cultural.

En este contexto es necesario recalcar que urge establecer políticas sociales para fortalecer a pueblos y comunidades indígenas en el territorio nacional y promover la difusión de sus lenguas y culturas.

Lo que se espera en esta fecha es la reflexión del Estado mexicano y lo hablantes de lengua materna para construir un espacio más humano, y menos discriminación hacia los pueblos minoritarios.

Periodista ñuu savi originario de la Costa Chica de Guerrero. Fue reportero del periódico El Sur de Acapulco y La Jornada Guerrero, locutor de programa bilingüe Tatyi Savi (voz de la lluvia) en Radio y Televisión de Guerrero y Radio Universidad Autónoma de Guerrero XEUAG en lengua tu’un savi. Actualmente es reportero del semanario Trinchera.