Este viernes, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador presentó los avances  de la refinería Dos Bocas, un proyecto que, a contracorriente, parece reavivar el milagro petrolero en México.

Texto: Redacción Pie de Página

Fotos: Presidencia

CIUDAD DE MÉXICO.-  Este 1 de julio el presidente Andrés Manuel López Obrador inauguró el inicio del periodo de prueba de la refinería Olmeca, en Dos Bocas, Tabasco.  “Llevaba más de 40 años que no se construía una refinería, la última fue de la Salina Cruz, 1980”, enfatizó el mandatario.

La inauguración se hizo en el marco de los cuatro años del triunfo de López Obrador en las elecciones de 2018. Al respecto, el mandatario también dio un pequeño informe sobre su administración.

Previamente, el proyecto de Dos Bocas fue duramente criticado por la oposición política y algunos medios de comunicación. Argumentaban que era imposible construir una refinería de ese tamaño en tan poco tiempo.

También se criticó la construcción de este proyecto en medio de un debate mundial que se inclina hacia la sustitución de combustibles fósiles por energías limpias y renovables.

No obstante, el presidente López Obrador se mostró confiado en el acto protocolario. Aseguró que este proyecto era parte del camino hacia la soberanía energética del país.

Vendíamos petróleo crudo y comprábamos gasolinas, eso es lo que ahora se está cambiando. Es una reconversión, es un viraje, ya no vamos a vender petróleo crudo, vamos a procesar toda nuestra materia prima para producir las gasolinas y el diésel”, expresó.

Y agregó que “esto, además de que significa empleos, significa también el ser independientes. Si hay una crisis energética como la que se está padeciendo ahora, pues tenemos nuestra gasolina, tenemos nuestro diésel y podemos conservar los precios para beneficio de los mexicanos, de la industria y de los consumidores”.

En su discurso, el presidente advirtió que, aunque los gobiernos del mundo están en un periodo de transición hacia otro tipo de energías, su administración decidió no apostarlo todo a ello.

No hicimos caso al canto de las sirenas, las voces de los que pronosticaban, de buena fe, tal vez, el fin de la era del petróleo y la llegada masiva de los carros eléctricos y de las energías renovables.

“Ese avance tecnológico más temprano que tarde se convertirá en realidad con el apoyo de los pueblos y de los países del mundo, y que será benéfico, sin duda, para la salud y el medio ambiente. Es claro que, para llegar a ello, todavía falta tiempo”, añadió.

Dos Bocas: un lugar estratégico

López Obrador aseguró que Dos Bocas fue el mejor sitio para la refinería, “porque ya es una terminal de Pemex. Aquí llega todo el petróleo de tierra y de agua somera de Tabasco y de Campeche, aquí llegan un millón de barriles diarios. Entonces, se cuenta con la materia prima, no se tuvo que hacer una infraestructura especial”.

Esta terminal marítima “es la más importante de México. Para tener una idea, estamos ahora extrayendo poco más de un millón 700 mil barriles de crudo que hay y aquí llega un millón; entonces no le va a faltar materia prima a la refinería”.

Entonces preguntó a la titular de Energía, Nahle García, cuántos barriles de gasolina serán refinados ahí.  A lo que la secretaria aseguró que de Olmeca se sacarán “170 mil barriles diarios de gasolina, 120 mil barriles diarios de diésel”.

Agregó que la refinería tiene tecnología de punta, y es una obra “100 por ciento hecha por mexicanos“. Aunque durante su intervención, Nahle García declaró que el dragado del terreno sobre el que se construyó Dos Bocas fue licitado por la empresa holandesa Van Oordt, la misma que construyó la plataforma de Pemex de ese mismo lugar en la década de los setenta.

En su turno, el director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, destacó que la administración actual “ rompió la tendencia de 15 largos años de declinación en la producción de petróleo, estabilizándola en el primer año e incrementándola. De manera que al cierre del mes pasado se alcanzó una producción promedio de un millón 767 mil barriles diarios”.

Agregó:

En materia de refinación, el proceso de crudo pasó de 519 mil barriles en noviembre del año 2018 a un millón 98 mil barriles en lo que va de 2022, incluyendo la refinería de Deer Park”.

Esta refinería es la sexta que ha construido el gobierno de México en toda su historia. Sumándose a la lista la refinería de Deer Park, ubicada en Texas, comprada por la administración de López Obrador en enero de este año.

La lista de invitados

En el evento estuvieron, entre otros: Octavio Romero Oropeza, director de Pemex; el almirante Ojeda, secretario de Marina; la secretaria de Energía, Rocío Nahle; el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O; el general secretario de la Defensa; Luis Cresencio Sandoval González.

También se contó con la presencia de gobernadores como Alejandro Murat, de Oaxaca, y la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum. Asimismo, asistieron empresarios como Carlos Slim, dueño de grupo Carso, al cual pertenece la constructora ICA, quien se encargó de las obras de la refinería. Durante su discurso, el presidente extendió un reconocimiento al empresario y las labores de la empresa.

Además de Dos Bocas, el gobierno federal planea terminar la construcción de la refinería de Tula, obra inconclusa durante el sexenio de Felipe Calderón. También anunció la creación de otra refinería en Salina Cruz, Oaxaca.

“Ya se inician los trabajos de prueba”, anunció al principio.

Yo creo que eso es lo más correcto, para que empiece a funcionar todo el conjunto. Nos decía Rocío que, como lo concebimos, vamos a poder procesar 340 mil barriles de petróleo”.