Las sequías extremas están provocando fuertes pérdidas de cultivos y riesgo de intensos incendios forestales en cinco estados del norte de México, con Coahuila y Chihuahua como casos más excepcionales. ¿Cómo ha evolucionado el fenómeno en esos territorios?
Texto Hassel Fallas* @HasselFallas / La Data Cuenta* @La_data_cuenta / La Verdad
Infografías: Hassel Fallas
CHIHUAHUA.- Como pocas veces en años, la escasez de agua provocada por las altas temperaturas y los prolongados periodos sin lluvia han llevado al país a una grave crisis hídrica. Hasta ahora, la ciudad más afectada ha sido Monterrey, capital de Nuevo León. Sin embargo, las bruscas anomalías del clima han ido extendiéndose en los últimos tres meses por otros estados del norte. Hasta mediados de julio de 2022, las sequías más excepcionales se han focalizado en Coahuila y Chihuahua.
Desde 2015, la presencia de sequías severa, extrema y excepcional en México ha llevado a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) a emitir, anualmente, un decreto de máxima alerta por la intensidad de estos fenómenos, que provocan escasez de agua, daños o pérdidas totales en cultivos y alto riesgo de incendios forestales.
Esta anomalía extrema del clima pone en alto riesgo el acceso a agua y se concentra en Sonora, Baja California, Baja California Sur, Chihuahua y Coahuila. En estas dos últimas entidades también hay 10 municipios en máxima emergencia por sequía excepcional que hace escasear, prácticamente en su totalidad, el líquido vital.
Escasez de agua, fuertes pérdidas de cultivos y el riesgo de intensos incendios forestales son las principales secuelas que las sequías extremas están provocando en cinco estados del norte de México. El severo fenómeno se extiende en una quinta parte, 40 de los 189 municipios de Sonora, Chihuahua, Coahuila, Baja California y Baja California Sur. Una situación que llevó recientemente a las autoridades de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) a decretar emergencia en el país, una decisión que la entidad ha debido tomar por octavo año consecutivo desde 2015.
De los cinco estados norteños impactados por la crisis, la situación todavía es más crítica en Coahuila y Chihuahua, donde hay 10 municipios afectados por un tipo de sequía peor que la extrema: la excepcional, la que arrasa totalmente con cualquier pasto y cultivo y donde, prácticamente, no hay una gota de agua en los embalses, los arroyos y los pozos.
La cantidad de municipios en esta emergencia absoluta se duplicó desde finales de junio, según el último reporte del “Monitor de la sequía” de Conagua del 15 de julio de 2022.
De acuerdo con Union of Concerned Scientists, una sequía es una anomalía caracterizada por la escasez temporal o permanente de agua. Tiene causas naturales y otras relacionadas con actividades humanas. El calentamiento global está aumentando su frecuencia, duración y severidad debido a cambios en la precipitación, el aumento de temperatura y el agotamiento del agua subterránea. En México, las sequías son atribuidas, principalmente, al fenómeno climatológico de “La Niña”, que se ha extendido más de lo previsto.
En un reporte del Instituto de la Atmósfera y Cambio Climático de la Universidad Nacional Autónoma de México, la investigadora Christian Domínguez, comentó que «climatológicamente es algo muy raro; teníamos más de 20 años sin que se prolongara tanto ese fenómeno (La Niña). Las anomalías frías de las temperaturas superficiales del Océano Pacífico tropical ocasiona que durante el verano llueva mucho en el centro-sur del país, principalmente en los estados del Golfo de México, y que en el invierno no haya precipitaciones, especialmente, en el norte».
Actualmente, en México, hay presencia de cinco tipos distintos de sequías, desde la más moderada hasta la más extrema. ¿Qué las caracteriza? El siguiente recuadro lo resume.
Utilice esta visualización para consultar los lapsos de sequía en los estados del norte o cualquier otra entidad de México entre 2016 y el 15 de julio de 2022. Si navega en un móvil le recomendamos visitar la versión interactiva web de esta publicación.
Considere que el gráfico de la izquierda muestra los periodos de sequía de anormal a excepcional. Mientras el de la derecha enfatiza únicamente en el conteo de eventos extremos y excepcionales. Los municipios están organizados de más a menos eventos extremos y excepcionales -en conjunto- ha tenido hasta la fecha.
Nota: Los datos de sequía de esta infografía y artículo proceden de un análisis de la información publicada por la Conagua en su sitio web. El reporte de la evolución de la sequía en México se actualiza cada quince días e incluye indicadores de sequía para 30, 60, 90 y 120 días.
Coahuila encabeza el conteo con más municipios con sequía excepcional. Seis de sus 38 localidades padecen esta anomalía. Dos semanas atrás, solo había una en esta condición. Ahora, además del municipio de Acuña, que repite, se sumaron: Jiménez, Múzquiz, Ocampo, Piedras Negras y Zaragoza.
Esta condición se ha repetido en otras ocasiones en al menos, la mitad de estos municipios, según un análisis propio con los datos históricos de Conagua. En Acuña, entre junio de 2018 y el 15 de julio de 2022, se han registrado 10 periodos de sequía excepcional. En tanto, en Jiménez y Piedras Negras se ha presentado en dos ocasiones. En cambio, Múzquiz, Zaragoza y Ocampo experimentan por primera vez esta anomalía desde 2016.
Entre los seis municipios coahuilenses habita el 14% de toda la población del estado (443 mil personas). Tres de ellos figuran entre los 10 más poblados del estado: Piedras Negras, Acuña y Múzquiz, tal y como muestra la siguiente infografía.
Por su parte, en Chihuahua cuatro de sus 67 municipios siguen afectados por la sequía excepcional. Se trata de: los desérticos de Coyame de Sotol, Manuel Benavides, Ojinaga y Guadalupe (al extremo norte de la entidad).
La condición de emergencia extrema que enfrentan estos cuatro municipios no es nueva para sus habitantes. En Ojinaga entre agosto de 2020 y la mitad de julio de 2022, se han producido 20 períodos de sequía excepcional. En el lugar, prácticamente no cae una gota de lluvia desde hace meses y las temperaturas se han acercado a los 50 °C. Lo mismo ha ocurrido en Guadalupe. Entre tanto, en Coyame de Sotol y en Manuel Benavides han ocurrido 9 eventos excepcionales.
Aunque las sequías excepcionales son las más críticas en sus consecuencias, los cuatro municipios chihuahuenses afectados por ellas son de los menos poblados del Estado: poco más de 31 mil personas viven en ellos (0.8% del total).
Sin embargo, las consecuencias de estas anomalías del clima han dejado huella en Ojinaga -uno de los seis municipios más afectados y hogar de 25 mil personas- Allí, distintos reportes de noticias dan cuenta de que es común ver ganado y animales muertos a causa de abrevaderos secos; también cultivos completamente perdidos.
De acuerdo con información de la Secretaría de Economía, las ventas del principal producto de exportación Ojinaguense: las verduras frescas o refrigeradas, decayeron un 30% en 2021 respecto de 2020. Pasaron de US$24 millones a poco menos de US$17 millones.
Justamente, la cuenca donde se localizan estos cuatro municipios y los otros seis de Coahuila es la del río Bravo, una de las más importantes del país y donde, por las condiciones áridas y semiáridas de la zona, las lluvias y disponibilidad de aguas son menores a las de otras entidades. Pese a estas características, la demanda por el agua de la cuenca del río Bravo se ha incrementado en los últimos años por la presión de actividades industriales, agrícolas y urbanas en ambos lados de la frontera de México y los Estados Unidos. ,
Cuatro de los diez municipios más habitados del Estado están enfrentando una sequía extrema, una situación que aumenta el estrés hídrico que vive la entidad. Este fenómeno se produce cuando la demanda de agua es más alta que la cantidad disponible. Entre estos municipios destaca el de Chihuahua, el segundo en cantidad de habitantes después de Juárez. También están siendo impactados por esta condición, las localidades de Delicias, la cuarta en número de habitantes. Asimismo, Camargo y Meoqui figuran en esa lista. En total, más de 1,3 millones de personas viven en los 13 municipios donde la sequía es extrema.
Aunque los efectos más severos de la emergencia por sequías en México se palpan, primordialmente, en el norte, actualmente el área con sequía de moderada a excepcional (D1 a D4) abarca un poco menos del 50% del territorio nacional. En la declaración de emergencia, emitida el 12 de julio de 2020 en el Diario Oficial de la Federación se contemplaron varias medidas para tratar de mitigar los impactos de la crisis hídrica que enfrenta el país. Entre ellas, destaca la que prevé la limitación temporal de los derechos de agua existentes, mediante una reducción provisional de volúmenes a los usuarios de las cuencas que se encuentren en condición de sequía severa, extrema o excepcional. Con esta acción se pretende abastecer agua para uso doméstico y público urbano a quienes no la tengan. Asimismo se determinó que para los usos industriales y agrícolas, se verificará que los volúmenes que se transfieran o cedan temporalmente, se entreguen directamente a la red de distribución en coordinación con el organismo operador.
*La autora es periodista, analista de datos y diseño de infografía
*Este artículo fue publicado en LA VERDAD con autorización de La Data Cuenta, plataforma de periodismo de datos independiente enfocada en cambio climático y derechos humanos con perspectiva de género. Puedes ver el reportaje original aquí (https://ladatacuenta.com/2022/07/20/sequias_mexico/)
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