Los ataques israelíes contra altos funcionarios de Hezbolá y Hamas, ha incrementado las tensiones ante una posible escalada regional, impulsada desde Israel

Texto: Redacción
Foto: Khaled Desouki / AFP

CIUDAD DE MÉXICO.- Luego del bombardeo en la capital de Líbano, Beirut, en el que fue asesinado el comandante de Hezbolá, Fuad Shukr, además del asesinato en Teherán de Ismail Haniya, lider politico de Hamas y agente fundamental en las negociaciones para alcanzar un cese del fuego en Gaza, sumado a la acusación de Israel contra Hezbolá de un bombardeo en Los Altos de Golán y las amenazas del presidente turco, Tayyip Erdogan, con responder a los ataques Israelís, la idea de un alto al genocidio no parece estar cerca.

La escalada de tensiones en Medio Oriente se da una semana después de la visita de Benjamín Netanyahu a Washington, la cual tuvo como finalidad solicitar a Estados Unidos agilizar la entrega de armas y bombas. “Dennos las herramientas más rápido y terminaremos el trabajo más rápido”, diji el primer ministro de Israel ante el congreso de ese país.

El asesinato del comandante chiíta libanes, Fuad Shukr, según lo dicho por el ministro de defensa israelí, se trató de una respuesta al ataque adjudicado por Israel, en la ciudad de Majdal Shams, anexa a los Altos de Golán, en la que murieron 12 jovenes que se encontraban en un campo de futból.

Por su parte, Hezbolá ha negado su participación en el atentado y acusa a Israel de una posible falsa bandera, como un intento de justificar una escalada militar contra el Eje de la Resistencia, que agrupa a diversos aliados ubicados en Siria, en Líbano con Hezbolá , las milicias chiitas en Irak, Afganistán y Pakistán, y los hutíes de Yemen, liderados por Irán.

Aunque todos estos grupos tienen en común su identidad chiita, al igual que la mayoría de la población en Irán, el eje también incluye a un grupo sunita, el movimiento palestino Hamás. Su inclusión en la alianza se debe a que comparte un enemigo común con Irán, Israel.

Esta noción de una escalada militar por parte de Israel a nivel regional, tuvo mayor peso con el asesinato del lider politico de Hamas, Ismail Haniya, figura fundamental de las negociaciones para frenar el genocidio en Gaza, durante la investidura del nuevo presidente iraní.

Lo cual, según declaraciones de funcionarios iraníes al New York Times, el líder supremo de Irán, Ali Khamenei, durante una reunión de emergencia del Consejo Supremo de Seguridad Nacional, ordenó un ataque en contra de Israel como respuesta del atentado que cobró la vida de Isail Haniya.

El grupo “Brigadas Al Qassam” brazo militar de Hamas, por su parte también afirmó que se trata de: «un acto peligroso que lleva la batalla a un nuevo nivel y tendrá importantes consecuencias en toda la región (…) Es momento de que la locura sionista acabe, de detener a este enemigo enfurecido, y de que su mano, que causa problemas aquí y allá, sea cercenada para disuadir su agresión»

A esto se suma las declaraciones del presidente turco Tayyip Erdogan, que aseguró que «este asesinato es un acto cobarde destinado a socavar la causa palestina, la heroica resistencia de Gaza y la justa lucha de nuestros hermanos y hermanas palestinos. Es un acto de infamia destinado a desmoralizar a los palestinos y someterlos (…) Sin embargo, la barbarie sionista no logrará sus objetivos como no lo hizo en el pasado», sentenció.

La muerte de Ismail Haniya y Fuad Shukr, fue catalogada por el secretario general de la ONU, António Guterres, como una intención de frenar los esfuerzos de un alto al fuego en Gaza.

La portavoz de Antonio Guterres afirmó que «El secretario general estima que los ataques que hemos visto en el sur de Beirut (Líbano) y en Teherán (Irán) representan una peligrosa escalada en un momento en que todos los esfuerzos deberían llevar a un alto el fuego en Gaza, a la liberación de los rehenes israelís, a un aumento masivo de la ayuda humanitaria para los palestinos y a un regreso a la calma en Líbano y en la línea azul»

Qatar y Egipto también se posicionaron sobre lo ocurrido, ambos países forman parte de las negociaciones para frenar los crímenes de lesa humanidad perpetrados por Israel

«La estrategia de los asesinatos políticos y la escalada deliberada contra los civiles en Gaza en cada una de las fases de la negociación lleva a preguntarse sobre cómo se pueden celebrar negociaciones en las que una de las partes asesina a la otra con la que negocia al mismo tiempo», aseguró Mohamed bin Abderrahmán Al Thani, primer ministro de Qatar.