El profesor Román Rubio López inició el movimiento de apoyo a la región Tarahumara en Sinaloa, con un colectivo que ha logrado el reconocimiento de los derechos de los pueblos Tarámari. Su cuerpo fue hallado en una ribera del río Sinaloa
Texto: Marcos Vizcarra / Revista Espejo
Foto: Revista Espejo
SINALOA.- El Profesor Román Rubio López fue desaparecido y luego asesinado por un grupo armado en Sinaloa de Leyva.
El hecho sucedió después de haber regresado del pueblo de Cuitaboca, en la Sierra Madre Occidental, donde dejó alimento y apoyos a grupos indígenas Tarámari, una actividad que realizó por más de 10 años.
“Era una fortaleza para todo el movimiento, para todo lo que hacíamos y ahora esto nos expone”, narraron integrantes del Colectivo Tarahumara Sinaloense a ESPEJO.
Rubio López comenzó a trabajar en favor de las personas Tarámaris hace más de 10 años, al tiempo de haber conocido a hombres y mujeres en la región del valle, con la siembra.
Tras convivir con ellos comprendió que en la Sierra había problemas de pobreza extrema, sin servicios, educación o empleos más allá de los que proponen los grupos armados.
“Supe de ellos hace más de 40 años, por un amigo”, contó Rubio López a este reportero en 2018.
Hay poco estudio antropológico sobre ellos, solo el Colectivo Tarahumara Sinaloense, la delegación del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas y académicos del Estado de Chihuahua han elaborado informes en los que se establece con datos difusos que ellos llegaron hace alrededor de 30 años.
Al subir a pueblos como Cuitaboca, Alisos de Olguín, Cañada Verde, Jikapory y en El Cochi descubrió que en estos lugares había todo un pueblo que oficialmente no existía para las autoridades.
Las visitas fueron constantes y decidió hacer colectas en cruceros de Guasave y Sinaloa de Leyva, así sumó a mujeres y hombres interesados en ayudar con víveres y ropa a las comunidades Tarámari.
Se formó un movimiento importante, tanto que se logró instalar clínicas con brigadas sanitarias mensuales, escuelas indígenas y la contratación de maestros bilingües.
Al Profesor Román Rubio López le costó plantones, manifestaciones y decenas de reuniones con funcionarios para lograrlo. Y sucedió.
Al mismo tiempo en que se desarrolló como activista y gestor intentó incursionar en la política, siempre en partidos con una visión de izquierda.
En 2018 logró integrarse en el cuerpo de regidores delaAyuntamiento de Sinaloa y en 2021 intentó ser diputado local con el partido Morena, pero perdió la contienda contra el candidato priista.
El reporte que se dio al Colectivo Tarahumara Sinaloense fue que la noche del 20 de julio el Profesor Román Rubio López fue desaparecido junto con otro hombre de nombre Esteban López Beltrán, quien fue coordinador de campaña para la alcaldía de Sinaloa por Morena. Ambos fueron encontrados asesinados en una de las riberas del río Sinaloa, en el malecón de la ciudad Sinaloa de Leyva.
Por el asesinato, Rubén Rocha Moya, gobernador electo de Sinaloa, señaló que es necesario que se inicien las indagatorias y se analice la carrera y vida de ambos políticos.
“Que hagan la investigación que corresponde con apego a derecho, imparcial, diligente en este momento que se puede esclarecer los hechos y que entreguen a la sociedad, sus familiares y a nosotros sus compañeros de Esteban y Román los resultados esclarecedores”.
Rubén Rocha, Gobernador electo de Sinaloa.
El pronunciamiento lo hizo al gobierno estatal y a la Fiscalía General del Estado, llamando, además, a la Cámara de diputados y organismos de derechos humanos a sumarse a la exigencia.
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