El gobierno federal informó que destinará un promedio de 500 millones de pesos para 50 ciudades en el país. Con ello, no será necesaria la venta del parque deportivo el Cárcamo, en Hermosillo, Sonora, como fue anunciado por la alcaldesa

Texto: Reyna Haydeé Ramírez

CIUDAD DE MÉXICO.- Para evitar que la alcaldesa de Hermosillo venda el campo deportivo el Cárcamo con el argumento de obtener recursos para bachear la ciudad, el presidente Andrés Manuel López, anunció un plan emergente de 25 mil millones de pesos, de los cuales 500 millones serán para la capital sonorense.

“Yo le voy a dar una buena noticia, primero al pueblo de Hermosillo, Sonora, y también a la presidenta municipal y a la gobernadora: no van a tener necesidad de vender ese terreno, según me informé, es para obras.

“Vamos a destinar 500 millones de pesos del gobierno federal para Hermosillo, para estas obras. Es un plan emergente que se va a aplicar en 50 ciudades, vamos a invertir 25 mil millones de pesos, es un promedio de 500 millones”; explicó este miércoles en su conferencia matutina.

Exclusivamente para el bacheo, precisó: “Van a tener 150 (millones de pesos). Es mi palabra”. Tras preguntar cuánto se obtendría por la venta del predio.

López Obrador consideró que la actuación de la presidenta municipal, de querer vender un campo deportivo para tapar baches es por la situación tan precaria del presupuesto de la mayoría de los gobiernos municipales y los estados.

Campo a la venta durante contingencia

Pie de Página informó que en medio de la crisis por la pandemia del Covid-19, la alcaldesa de Hermosillo, Célida López Cárdenas, preparó en sigilo la venta “fast track” de un antiguo e icónico campo deportivo local, ubicado en La Sauceda, una zona de humedal y de los pocos pulmones verdes de esta desértica capital.

Esta acción alertó a ambientalistas, asociaciones deportivas y ciudadanos que, a riesgo de contagio, se movilizaron para evitar la venta que se empezó a gestar a mediados de marzo y estaba programada para este viernes 17 de abril. Se haría en subasta virtual por la contingencia sanitaria.

La venta era quizá inminente, pues hace un año, ya se había acercado un particular que ofrecía 150 millones de pesos por el Cárcamo. Sólo era cuestión de agilizar trámites para la subasta virtual.

Apenas el 11 de marzo, López Cárdenas dijo en un video que el 29 de marzo haría la primera consulta pública de su administración. A diferencia de los anteriores gobiernos que todo lo “hacían en lo oscuro”, dijo, ella sí tomaría en cuenta a los ciudadanos.

“Estoy convencida que la única manera de transformar esta ciudad es tomándote en cuenta. Los gobiernos del pasado se acostumbraban a tomar decisiones en lo oscuro, unas cuantas personas, favoreciendo sus intereses y los intereses de su amigos, de sus cómplices, esta es una nueva etapa del democracia en Hermosillo”, dijo en el vídeo.

Pero contrario a su dicho público, un par de días después, sin anuncio ni consulta alguna, solicitó un avalúo del predio de casi 10 hectáreas.

Para el 19 de marzo ya tenía listo el avalúo. Y 9 días después, el sábado 28 de marzo, en plena contingencia, presidió la sesión ordinaria de Cabildo. A la sesión no asistieron 5 de los 21 regidores, argumentaron el confinamiento por la pandemia.

“Yo no quería, no queríamos someter la venta este terreno para que ese recursos se perdiera en el gasto corriente. Es algo que no se merecía la ciudad”, dijo la Alcaldesa a los regidores.

La venta quedó aprobada en menos de 25 minutos, con los 18 ediles asistentes, MC, PRI, PANAL, PT y Morena. Antes de votar, la Alcaldesa preguntó si había algún comentario.

Algunos regidores argumentaron que de niños jugaron en el Cárcamo, pero apoyaban venderlo.

El priista Jesús Ávila dijo haber vivido en esa colonia y que dado que los bienes eran para revelar los males apoyaba la venta. Pero añadió una pregunta: de dónde serían reubicados los campos, eso fue suficiente para que la alcaldesa le ofreciera trato especial.

“La mayoría de la gente que juega ahí, no vive ahí, me refiero estrictamente a las ligas. Por lo tanto trasladarse de ahí a unas cuantas cuadras, o para otra localidad no es una afectación”, respondió la alcaldesa.

“Lo que sí, hacer el compromiso contigo regidor de poder apoyar a la colonia incluso analizar la situación de cómo se encuentran esas vialidades. Y puede priorizarse que se atienda primero con este recurso y trabajar contigo un proyecto, creo que es importante”, dijo.

Los demás regidores avalaron sin problema alguno, como Carlos León, de Movimiento Ciudadano.

“Yo no creo que la gente se vaya a enojar por la venta de un terreno, cuando hay una contingencia y cuando la ciudad ocupa recursos para bachear vialidades”, dijo.

El acuerdo

La venta del Cárcamo se decidió a la ligera, en 20 días, sin un plan o proyecto. Pero sí basado en tres promesas: aplicar el 60 por ciento en obras de bacheo, el 30 por ciento en apoyos a microempresarios por el Covid-19 y el 10 por ciento en equipar un nuevo campo deportivo.

El terreno que se autorizó para venta es de 98 mil 201 metros cuadrados, con un valor comercial de 186 millones 90 mil pesos. Ubicado en el Proyecto Río Sonora.

El Síndico explicó que este predio era del Gobierno del Estado, pero en diciembre del 2011 lo entregó al Municipio en pago por un adeudo de predial estimado en alrededor de 150 millones de pesos. El predio no se inscribió en el Registro Público de la Propiedad hasta agosto del 2016.

En el acuerdo, se indica que el terreno es de uso mixto.Y que los recursos que se obtengan de la venta serán para: “Obra pública de extrema necesidad de bacheo, recarpeteo, pavimentación, servicio preventivo y correctivo a las calles y vialidades de nuestro Municipio”.

“Se está en negociaciones para reubicar estas instalaciones a un diverso predio en el mismo sector, de inmediato y no dejar desprotegido esta importante actividad pública y colectiva”.

De no venderse en la subasta se autorizó venderlo en forma directa.

Y sobre el área deportiva se precisa: Se autoriza la reubicación de las instalaciones deportivas “a un diverso precio en el mismo sector, con dimensiones, que permitan cuando menos, contar con la misma infraestructura.

González destaca que el Cárcamo no está registrado como área verde, de ser así estarían impedidos para venderlo.

Democracia simulada

La Alcaldesa decidió no consultar a los ciudadanos para vender un campo deportivo, que tiene tres canchas de béisbol, una de futbol con pasto sintético, una pista de motocross y una pista de atletismo y al que por lo menos y en promedio cada semana asisten 6 mil personas. 

También decidió no hacerlo público en sus redes sociales, como acostumbra. Pero sí respondió a un tuit del periodista Aarón Tapia que ese mismo día le cuestionó porque no consultó la venta del Cárcamo. Llamándolo ignorante.

“No lo queríamos vender, revela el Síndico Municipal, Fermín Gaxiola, porque ahí construirían un edificio municipal.

Hace un año y medio, reveló, apareció un comprador particular que ofreció 150 millones de pesos por el Cárcamo.

“El Cárcamo nos lo quisieron comprar hace casi un año, no quisimos, (porque) estábamos con el plan (de construir un edificio municipal)”, reveló.

La idea de venderlo, explicó, surgió a mediados de marzo cuando la Alcaldesa regresó de un viaje a la Ciudad de México, donde funcionarios del SAT le informaron que no habría recursos adicionales para Hermosillo.

Y ahí en medio de la pandemia por covid-19 empezaron a preparar la venta a marcha forzada. Porque el Municipio está en bancarrota.

“La Federación no nos ha asignado ningún recurso, somos la única administración municipal que no hemos recibido apoyo especial, en un año  medio que llevamos, ni del gobierno del Estado.

Han hecho esfuerzos de ser austeros y reducir gastos, pero no ha sido posible, como la promesa de reducir la nómina. 

“Nuestro esfuerzo era 200 empleados, 180 sindicalizados, no tengo la cifra de cuántos van, pero no hemos llegado a esa cifra”, reconoce.

Tampoco han podido concretar un préstamo de 800 millones de pesos, porque el endeudamiento que tienen de más de 2 mil millones de pesos, no les permite acceder a créditos.

“Andrés pide que los Ayuntamientos sean autosuficientes, está exigiendo austeridad, que él ha implementado, pero el Ayuntamiento no sólo está en bancarrota, está endeudadísimo”, expuso el Síndico. 

Organización ciudadana en contra

Ciudadanos que se movilizaron a pesar de la contingencia por covid-19, marcharon, protestaron, juntaron al menos 32 mil firmas, incluso armaron una defensa legal para impedir la venta. El martes 14 de abril lograron que la alcaldesa informara en un video la suspensión temporal de la subasta, pero no la cancelación de la venta.

Esto no habría sido posible en plena contingencia sanitaria, pero este grupo ciudadano se está organizando desde hace dos años.

Artistas, ambientalistas, deportistas y más ciudadanos trabajan en un proyecto llamado Corredor Biológico La Sauceda, un predio abandonado, que tiene un humedal y de los pocos pulmones verdes de la ciudad, propiedad del Gobierno del Estado que también proyecta venderlo.

El Cárcamo era parte de La Sauceda, pero como no se podía construir ahí, justo por ser un cárcamo de rebombeo de las plantas de agua potable del lugar, se usaba como estacionamiento o campo deportivo llanero hasta 1994 que se entrega a ligas deportistas.

En 1994 el Gobierno del Estado se los entrega, sin ninguna formalidad, a ligas de futbol y béisbol que fueron reubicadas del Vado del Río Sonora, y poco a poco se acondicionaron tres campos de béisbol, uno de futbol, pista de atletismo y espacio para practicar motocross y bicicross.

“Un promedio de 6 mil gentes por semana visitan el Cárcamo para hacer deporte”, explica Evaristo Benítez, Unión de Ligas Deportivas de Hermosillo.

En el 2011 el Gobierno del Estado lo entregó al Municipio en pago de 150 millones de pesos de adeudo de predial.

Benítez destaca que 18 millones de pesos, no es nada para tener algo mejor que el Cárcamo, pues equipar tan sólo un campo costaría 3 millones de pesos.

Consideró también que vender el Cárcamo para bachear las calles sería prácticamente tirar millones a la basura, pues la forma en que se “bachea” en esta Capital, no reúne los requisitos técnicos que permitan un trabajo de calidad, que dure mas de un año.

“Son trabajo que dan para unos ocho meses”, precisó.

Las ligas deportivas de Hermosillo se unieron para expresar su negativa a la reubicación del Cárcamo, porque sería la tercera ocasión que los reubican y nunca hay garantías de los predios que les asignan.