Habitantes de Campeche, Veracruz y Tamaulipas demandaron al gobierno tomar medidas a causa de los derrames de petróleo de las plataformas del Golfo de México, incluso, dijeron que ellos mismos podrían poner manos a la obra si se les orienta y capacita al respecto

Texto: Arturo Contreras

Foto: Michael Balam / Cuartoscuro

CIUDAD DE MÉXICO.- “Estamos dispuestos a ser capacitados para limpiar el área, que Pemex y el gobierno se responsabilicen por el derrame”, pide Ana Gómez, habitante del norte de Veracruz, en la frontera con Tamaulipas, quien desde hace un mes empezó a detectar la presencia de restos de petróleo en donde vive. 

Ana y su familia viven desde hace 25 años al sur de la escollera de playa Miramar, en Ciudad Madero, Tamaulipas, en un pequeño rincón de la costa llamado Playa Escondida, donde edificaron una casa y un salón de eventos en donde viven y de los que se sostienen a través del turismo. 

Hace un mes, Pie de Página había publicado que Ana y su familia habían empezado a ver montículos de casi un metro de chapopote solidificado en la playa, así como pequeños trozos de crudo y crudo derretido por el calor a lo largo al menos de 135 metros de la línea costera. 

La presencia de restos de materiales petrolíferos ha aumentado en las últimas semanas, una situación que para ella no tiene precedentes, y ella los asocia con los derrames de una plataforma de Pemex en Campeche el 6 de julio pasado, aunque no tiene otra prueba más que su experiencia.

“No vemos ninguna solución”, aseguró Ana Gómez en una conferencia de prensa organizada por el Centro Mexicano de Derecho Ambiental y por Conexiones Climáticas, ambas organizaciones ambientales que han dado seguimiento a los incidentes recientes en el Golfo.

“Los montículos abarcan un metro y están a lo largo de la playa. Queremos que las autoridades se hagan cargo y nos puedan ayudar con la limpieza”, reclamó. 

Por su parte, Miriam Lastra, del colectivo internacional Rebelión o Extinción (o Exctinction Rebellion según su nombre en inglés), aseguró que las afectaciones en las costas de campeche están afectando especialmente a los campamentos tortugueros que están en plena fecha de liberación de crías de tortuga al mar. 

“En Campeche hay 16 campamentos tortugueros en un territorio de 176 kilómetros de protección”, dijo en la conferencia. “La liberación de tortugas es en esta mera época, estos derrames afectan a las tortugas, pueden ser lesiones en la piel, por la ingesta, o por la toxicidad que provocan. 

También señaló que en las comunidades cercanas, dedicadas a la pesca, han detectado afectaciones por la pérdida de ingresos y la disminución temporal de especies disponibles para la pesca. 

Por su parte, Nancy Martínez Gómez, habitante de la comunidad de Oriente Mediodía en el municipio de Esquinal, al sur de Poza Rica, Veracruz, asegura que en esa zona, rica en pozos petroleros y de gas natural, los derrames son continuos, sin embargo, no hay un seguimiento en cuestiones como contaminación del agua, de los mantos o del ambiente por parte de la paraestatal. Por lo que no le sorprende la inacción de Pemex sobre los derrames en las costas del golfo.