La actual crisis de sequía que vive Chihuahua y el problema recurrente de tala ilegal se han vuelto la mancuerna perfecta para desatar más de una decena de incendios que arrasan con los bosques del territorio indígena
Texto: Óscar Rosales / Raíchali
Fotografías y videos: Cortesía
CHIHUAHUA.- Al menos once municipios de Chihuahua se han visto afectados durante las primeras semanas de junio por la presencia de 24 incendios activos que ya han dañado 19,411 hectáreas de bosque y han generado una movilización de cientos de brigadistas y voluntarios que intentan apaciguar los siniestros provocados por las condiciones climáticas y actos humanos.
Los datos de la Dirección de Desarrollo Forestal de Chihuahua indican que los municipios afectados hasta el momento son Casas Grandes, Carichí, Guazapares, Maguarichi, Guachochi, Temosáchic, Uruachi, Guadalupe y Calvo, Balleza, Bocoyna y Ocampo. El territorio afectado en los últimos días es equivalente a poco más de dos veces el tamaño de la capital chihuahuense.
Según información de la Secretaría de Desarrollo Forestal, hay 777 personas combatiendo los incendios, entre los que se encuentran elementos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), Protección Civil, la Secretaría de Defensa Nacional (SEDENA), así como decenas de silvicultores y voluntarios de las comunidades y ejidos.
Pese a los esfuerzos, el fuego no ha podido ser controlado en su totalidad.
Casas Grandes, lugar donde el incendio ha durado ya 12 días y se cree que fue iniciado por un rayo que cayó en la zona, es el municipio donde más se tiene avance, con más del 80% de control y un 70% de liquidación, informó el ingeniero Refugio Luna del área de Desarrollo Forestal.
Tan solo este 2021, se han combatido 531 incendios en diferentes municipios del estado. En comparación con el año pasado, ha habido hasta el momento un incremento del 80%, dado que Chihuahua registró 430 incendios forestales en todo el 2021, lo que lo convirtió en el quinto estado con mas siniestros de este tipo en el país, según datos de la Conafor.
El problema de sequía no es una novedad en Chihuahua. El estado fue declarado zona de Desastre Natural del 1 de mayo al 30 de noviembre del 2020 ya que el 59.8% del territorio se encontraba afectado por sequía severa, según el reporte del Monitor de Sequía en México de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
En contraste, en mayo de este año se reportó que el 73.3% del estado es el que se encuentra ahora bajo las mismas condiciones de sequía.
Tampoco las lluvias han favorecido a la situación. En el 2020 solo hubo 260.8 mm de precipitaciones, la cantidad más baja de la última década.
Al corte de mayo del 2021 se han registrado 40.4 mm de lluvia que en comparación con los 63 mm que ya tenía contabilizados el 2020 para la misma fecha, lo posiciona hasta el momento como un año más seco en ese sentido.
Al momento, y con 19 de los 67 acuíferos sobreexplotados, las autoridades no han emitido otra declaratoria de Desastre Natural para este 2021 que permitiría acceder a recursos del Fondo de Desastre Naturales (FONDEN) para coadyuvar el combate al fuego.
“El estado con las temperaturas que tiene estamos convertidos en un horno, pero la buena noticia es que para fin de semana, ya se prevén, en el pronostico meteorológico, aunque sean lloviznas”, señaló Protección Civil Estatal, que espera el fenómeno ayude a controlar un poco los incendios.
Aunado a las condiciones de sequía, la tala ilegal es un problema recurrente en la Sierra Tarahumara que propicia que los bosques sean quemados con tal de esfumar los rastros de los arboles talados.
La tala ilegal ha sido un problema que las comunidades de la sierra han denunciado por años ante el gobierno estatal y federal, y que también ha sido abordado en diferentes espacios, como en foros públicos organizados por diversas asociaciones civiles.
“Le prenden para borrar las evidencias”, comentó Refugio Luna, quien explicó que el acto es una estrategia utilizada con mayor frecuencia en esta temporada.
En el mismo sentido, Luna informó que si existen denuncias por tala ilegal en los municipios de Ocampo, Bocoyna, Carichí y Guachochi, sin embargo, hasta el momento no ha habido detenciones.
Según la vocería de la Fiscalía General del Estado (FGE), en el 2021 han ocurrido dos arrestos ligados a la quema de bosques, el último de ellos en abril en Guachochi, donde un hombre quemó de manera intencional alrededor de 4 mil metros cuadrados de bosque. Fuera de ese antecedente, no ha habido otras detenciones hasta el momento.
La indignación y el descontento social por los múltiples incendios que han azotado el estado, se han visto también transformados en un llamado a la unión y solidaridad para apoyar a los brigadistas y voluntarios que combaten el fuego en las zonas activas.
En diversos puntos del estado se recolectan víveres y herramientas en centros de acopio que se han creado con intención de responder a la emergencia. También se invita a la ciudadanía a integrarse a los equipos que controlan los incendios.
Esta nota fue realizada por RAÍCHALI, que forma parte de la alianza de la Red de Periodistas de A Pie. Aquí puedes consultar la publicación original.
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