Un convoy del gobernador Diego Sinhue e invitados generó molestia e incomodidad por el cierre de calles con patrullas oficiales y la frivolidad del paseo, frente a peticiones de ayuda para enfrentar incendios en Xichú

Texto: Verónica Espinosa / @veroespinosav

Fotos: Efrén Cruz y Especial

GUANAJUATO.- Un nutrido convoy de varias camionetas entró a la cabecera municipal de Xichú este sábado y en minutos se despertó la expectación.

Los habitantes de esa localidad pronto pasarían del gusto a la decepción: no eran refuerzos para combatir los incendios forestales que desde hace varios días mantienen en vilo a esta región noreste de Guanajuato, particularmente entre San José Iturbide y Tierra Blanca. Era un grupo de paseantes encabezados por el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo.

La sorpresa no duró mucho cuando la gente vio de quién se trataba. Es cada vez más frecuente ver al gobernador Rodríguez Vallejo, a su familia y a algunos invitados aparecerse por estos parajes de la Sierra Gorda, específicamente del lado de la comunidad El Platanal, que ha resultado un sitio de recreo ideal para el mandatario, particularmente en días de asueto.

Pronto los vecinos de la cabecera de Xichú se enfrentaron con una más de las autoritarias costumbres del poder durante esta visita del gobernador. Patrullas de la Policía Municipal cerraron el paso por la calle principal, a la altura de la casa de visitas -en la que se recibe a invitados oficiales del gobierno municipal y estatal- y obstruyeron el tránsito local por la única vía de acceso y salida directas.

Fotos: especiales.

En las redes sociales se expresó la molestia de vecinos de esta zona del estado por el cierre de la calle, pero sobre todo, por lo que consideraron una falta de empatía ante la situación que viven por el embate de incendios como el que desde hace una semana se ha extendido por 200 hectáreas de Cerro Blanco, en San José Iturbide.

En una página de Facebook de comunidad de Xichú se consignó esta visita y algunas de las reacciones que generó:

“El sábado (27 de marzo) llegó el gobernador Diego Sinhue al municipio pues se montó un fuerte operativo para su llegada a la casa del pueblo cerrando las calles, a las personas que necesitábamos caminar por ahí no nos permitieron el paso y qué raro que cuando el municipio de San José más lo necesitaba se fue al Platanal para disfrutar unas vacaciones sabiendo que todo se estaba quemando… acaban de subir un comunicado para quien quiera donar víveres y llevarlos a San José, pero por qué no el dinero que se gasta en la venida del gobernador se dona para combatir el incendio en San José, ellos gozando y el pueblo como siempre es el que tiene que pagar las consecuencias”.

Otros usuarios se quejaron también del cierre de la calle principal de Xichú con patrullas de la Policía Municipal, mientras permanecía la larga fila de camionetas tipo pick up y suburban estacionadas cerca de la casa de visitas.

“Diego Sinhue con sus aires de semidios cerrando la calle principal del pueblo y única vía de entrada y salida directa, para poder estacionar a gusto sus Lincoln, Rzr, etcétera, para esperar a sus amigos que se quedaron atrás e irse a vacacionar al Platanal, mientras el estado literalmente arde en sus tantos problemas”, se lee en otra publicación de un vecino del municipio.

El convoy salió de Xichú hasta el lunes por la tarde.

Los otros fuegos para Guanajuato

La población de esta zona del estado se ha unido a brigadistas de la Comisión Nacional Forestal, de la Secretaría del Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial del estado, Protección Civil estatal y de los municipios, así como soldados y Guardia Nacional para enfrentar éste y otros siniestros que han amenazado con propagarse a otros puntos como el Área Natural Protegida de Pinal del Zamorano, en Tierra Blanca.

La emergencia ha sido atendida también por habitantes de las comunidades aledañas, que claman ayuda y envían lo que dentro de sus posibilidades está: agua, víveres, suero, herramientas y otros insumos para los campamentos instalados para coordinar la lucha contra el fuego que ha matado vegetación y fauna de la zona.

Una estimación de la Secretaría del Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial del estado (SMAOT) refiere que resultaron afectadas 440 hectáreas sólo en los incendios en San José Iturbide y Jerécuaro.

En tanto, el fin de semana se consumieron cerca de nueve hectáreas entre las comunidades de Sangre de Cristo y La Luz, aledañas al Cerro del Cubilete, donde se ubica el monumento a Cristo Rey de la Montaña, que es visitado por miles de personas a lo largo del año.

Los incendios han alcanzado zonas de los municipios de San José Iturbide, San Felipe, Jerécuaro, Tarimoro, Silao y Guanajuato capital; este último entre las comunidades de Sangre de Cristo y La Luz, aledañas al Cerro del Cubilete, y con saldo de por lo menos nueve hectáreas siniestradas.

Este lunes, se mantienen vivos siniestros en el ejido de Puruagua en Jerécuaro, Sierra de los Agustinos en Tarimoro, así como en Cerro Alto de San José Iturbide e inmediaciones con Tierra Blanca, según información de habitantes de esos municipios, así como de Protección Civil del estado y de la SMAOT.

La Coordinación de Protección Civil publicó el lunes por la mañana que desde temprano se realizó una reunión para definir la coordinación y continuar con el combate al incendio en San José Iturbide, donde se lleva un control del avance del 80 por ciento y liquidado un 70 por ciento, reportó.

“Se espera que las condiciones climatológicas favorezcan avanzar”, publicó PC del estado.

Efrén Cruz, guardabosques del Área Natural Protegida de Pinal del Zamorano -ubicada precisamente entre los municipios de San José Iturbide y Tierra Blanca- dijo en entrevista telefónica que voluntarios de Tierra Blanca acudieron el fin de semana para apoyar el combate al fuego, ante el temor de que se extendiera a esa ANP.

“Fuimos como 350 personas del municipio, algunas del Ejido del Roble. Había mucho personal, nos coordinamos con Conafor y más dependencias. Estaban soldados y Guardia Nacional, en el campamento. Ellos apenas iban a subir en la noche, pero nosotros nos retiramos”.

Este incendio comenzó el lunes 22 de marzo. Es el segundo de esta magnitud en dos años.

Los comuneros decidieron mantenerse a la expectativa el lunes, debido al riesgo prevaleciente por los vientos.

“Ya no se puede hacer nada cuando el incendio está tan vivo; la gente se debe retirar hasta que se bajen los vientos, con el viento es mucho riesgo para la gente, podemos quedarnos encerrados porque el viento cambia de dirección”, explicó.

Mientras que a través de mensajes en redes sociales y telefónicos, pobladores hicieron llamados a autoridades y a sociedad civil para reforzar la presencia humana para controlar el incendio.

En un comunicado del viernes 26, la Secretaría del Medio Ambiente del estado informó que se habían detectado unas 200 hectáreas consumidas por el fuego, mismo que alcanzó vegetación de sotol, pingüica, encino y hojarasca, así como fauna de la zona.

En el caso del ejido de Puruagua en Jerécuaro, las brigadas se mantienen trabajando “a través de brechas cortafuego y quemas de ensanche, así como combate directo a las llamas en donde éstas son de poca altura”, lo que se dificultó por la densa vegetación y lo accidentado del terreno, según la dependencia estatal.

“Se tiene una afectación visual de 240 hectáreas consumidas de encino-pino, así como de la fauna zona, pues los brigadistas han encontrado especies sin vida a causa del humo y del fuego” en el ejido Puruagua.

Autoridades municipales y habitantes hacían eco de las peticiones de apoyo y alertaban sobre la emergencia en la Sierra de los Agustinos (otra Área Natural Protegida) así como en el Ejido Puragua.

“Se les hace una atenta invitación a todos los voluntarios que quieran apoyar en el combate al fuego que se suscita dentro del Área Natural Protegida Sierra de los Agustinos, a presentarse el día de mañana a las 6:30 hrs. en la localidad de Piedras de Lumbre para recibir instrucciones por parte de Protección Civil del estado. Dicha reunión será realizada en la parte alta de la comunidad conocida como «La Lagunilla». La herramienta a utilizar serán azadones para la creación de brechas cortafuego por los que cuenten con uno se les pide de la manera más atenta llevarlo. ¡Ayudemos a este importante pulmón del municipio!”, se difundía el fin de semana.

Un centro de acopio fue instalado en las oficinas de Seguridad Pública de Jerécuaro, al que se invitó a la ciudadanía a llevar agua embotellada, electrolitos orales, barras energéticas, leche y enlatados para los brigadistas.

Esta nota fue realizada por POPLAB. La reproducimos con su autorización. Aquí puedes consultar la publicación original.