En la colonia Morelos de la Ciudad de México una familia apostó su capital para poner una panadería; en plena pandemia sus roscas de reyes se venden, literalmente, como pan caliente

Texto y fotos: Isabel Briseño

Un local de carnicería en la calle Pintores 27, de la colonia Morelos, fue convertido en una panadería para hornear innovadoras roscas de reyes. Fredy y su esposa Daniela platican que a pesar del miedo de perder su capital se arriesgaron a poner un negocio, en plena crisis.

Fredy trabajaba en una panadería, hasta que en abril del año pasado lo empezaron a «descansar» y a pagarle menos, como a muchos trabajadores debido a los cierres de negocios por la contingencia.

Así que Fredy se aventuró a hornear pan por su cuenta, para su sorpresa la venta incrementó rápidamente. A los pocos días un conocido les ofreció un local con todo y horno. Así nació la panadería Los Galicia.

Conforme se acercó el Día de Reyes Fredy y Noel, un viejo compañero de horno, iniciaron la faena de hacer roscas. Desde el día 4 de enero a las 7 de la noche empezaron las labores, los amigos terminaron de trabajar 24 horas después.

Las roscas fueron innovadas, les agregaron ingredientes como fresas, conejitos de chocolate, cerezas, rellenos de queso con zarzamora, crema con chocolate y, claro, la receta clásica. Todo para brindar más opciones a sus clientes, “la idea es que de la vista nazca el antojo”.

En la panadería de Fredy y Daniela se hicieron más de 100 roscas. El éxito de su negocio los obligó a solo vender a gente que apartó su compra. Incluso, han tenido que rechazar clientes.

En el rostro de Noel se nota el cansancio de los días sin dormir, Fredy y él recurren a buen café y a bebidas azucaradas para espantar el sueño, cuenta que años anteriores resistían hasta 4 noches sin dormir, pero los años han pasado y ya no es lo mismo.

Además, la panadería hizo conchas con los rostros de los tres reyes magos, a pesar de que es más trabajo, es un producto que ha volado.

La pequeña panadería de la colonia Morelos ahora es visitada por gente de varias zonas de la metrópoli, incluso gente de otras entidades buscan el buen pan que hacen Fredy y Daniela.