Premio Mariela Vanessa

19 mayo, 2025

El Premio Mariela Vanessa es para ellas, para todas, para todos. Para que ninguna historia quede silenciada, para que otras jóvenes como Mariela puedan soñar, escribir y ser leídas. Para quienes, con sus palabras, siguen abriendo caminos de esperanza y verdad

Por Colectivo Hasta Encontrarles CDMX, Nuestro Fuego Colectivo y Las Siemprevivas

En el marco del 8M, Estudio Magnolia y la Cooperativa Editorial Heredad lanzaron la convocatoria del Premio Mariela Vanessa para escritoras emergentes de América Latina 2025. Este reconocimiento lleva el nombre de mi hermanita Mariela, estudiante de la Licenciatura en Lengua y Literaturas Hispánicas en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, desaparecida el 27 de abril de 2018.

Cuando en diciembre de 2024 ambas editoriales solicitaron permiso a nuestra familia para poner en marcha esta iniciativa, nosotras con gratitud y emoción accedimos porque sentimos que este proyecto honra profundamente a Mariela, cuyo sueño era convertirse en escritora. Pensamos que ese anhelo, lamentablemente truncado hasta hoy, podía encontrar continuidad en las voces de otras mujeres jóvenes como ella. Esta es también una manera de seguir apelando a la justicia del caso de mi hermana, a quien seguimos buscando con vida, y de mantener presente su memoria en lo colectivo.

Para nosotras, hablar de las personas desaparecidas no es una opción: es una necesidad urgente y constante. En un país donde miles de familias viven entre la incertidumbre y el dolor, es imprescindible seguir visibilizando estos daños que nos atraviesan como sociedad. Nombrar lo que tanto duele, aunque nos tiemble la voz, abrazar a quienes caminan en la misma oscuridad, tomar de la mano a las familias que, como nosotras, buscan respuestas donde sólo hay silencio. Porque donde debería haber justicia, hay vacío. Y ese vacío, lo llenamos con memoria.

Por eso confiamos en Estudio Magnolia y en la Cooperativa Editorial Heredad para llevar a cabo este proyecto satisfactoriamente porque sus trayectorias han estado comprometidas con abrir conversaciones sobre temas que cuesta trabajo mirar, pensar y acompañar. Deseamos que muchas mujeres que, como mi hermana, sueñan con escribir, vean en esta convocatoria una oportunidad para comenzar un camino acompañadas por otras y otros, esperando que los libros que surjan no sólo impulsen las carreras de nuevas escritoras, sino que también abran rutas de diálogo y acompañamiento en torno a temas urgentes como lo es la crisis de las personas desaparecidas en México.

A veces nos preguntan: ¿qué podemos hacer para ayudar? Y la respuesta es: todo. Todo gesto de bondad y amabilidad, toda palabra de aliento, de ternura, toda acción pequeña o grande que se haga desde la empatía, suma. Porque en esta lucha, lo único que esperamos de la vida es un poco de humanidad, un poco de compasión que nos permita seguir sosteniéndonos con esperanza.

Nuestro camino ha sido el de transformar el dolor, no porque sea posible aliviarlo, sino porque necesitamos hacerlo comprensible para quienes no lo han vivido. No es fácil explicar lo que se siente perder a un ser amado de esta forma, pero lo intentamos, porque mientras más personas puedan entender, aunque sea un poco, más cerca estaremos de cambiar esta realidad. Pero ¿cómo mirar de frente al horror sin quebrarnos? ¿Cómo sostener la mirada sin desaparecer también por dentro? A veces, la única forma posible es a través del arte.

El arte no borra el dolor, pero nos ha dado un espacio para gritar sin rompernos. Nos ha permitido tocar corazones dispuestos a sentir con nosotras, compartir nuestra vulnerabilidad, contar esas historias que no deberían existir. Es también una forma de resistencia: sembrar memoria, resistir al olvido, preservar lo que amamos.

Este premio significa eso: resignificar la persistencia de la memoria. Honrar las vidas que nos han sido arrebatadas de una y mil formas. Porque desaparecer no puede ni debe significar disolverse en la nada, que quienes nos faltan siguen aquí, en cada lucha que no se rinde. Y que si algo me enseñó la dulzura de mi hermanita Mariela es que, incluso en medio del dolor más profundo, es posible florecer. Que se puede persistir a través del amor, de las palabras… ♡

El Premio Mariela Vanessa es para ellas, para todas, para todos. Para que ninguna historia quede silenciada, para que otras jóvenes como Mariela puedan soñar, escribir y ser leídas. Para quienes, con sus palabras, siguen abriendo caminos de esperanza y verdad.

Hasta encontrarte, Mariela

Hasta que todos los que nos faltan vuelvan a casa

Gabriela Díaz Valverde

Jacqueline Díaz Valverde

Las convocatoria puede consultarse en: Estudio MagnoliaHeredad Palabras.

Este mensaje cuenta con el respaldo firme y solidario de quienes, con dignidad, sostienen la búsqueda, la verdad y la justicia.

Firman:

  • Colectivo Hasta Encontrarles CDMX
  • Nuestro Fuego Colectivo
  • Las Siemprevivas

Portal periodístico independiente, conformado por una red de periodistas nacionales e internacionales expertos en temas sociales y de derechos humanos.