Anora: dignificar el trabajo sexual

1 febrero, 2025

La última cinta de Sean Baker, Anora, retrata la vida de una joven trabajadora sexual en Nueva York que lucha por su dignidad en un mundo lleno de estigmas. Entre drama y comedia, la película explora las dinámicas de poder, la hipocresía social y la resistencia de su protagonista ante un sistema que la invisibiliza

Texto: Andi Sarmiento

Foto: Tomada del trailer oficial

CIUDAD DE MÉXICO. – Esta es la última cinta del director estadounidense Sean Baker, que entre drama y comedia nos presenta la vida de Ani, una trabajadora sexual veinteañera que habita en Nueva York y debe luchar contra los estigmas sobre su profesión, defendiendo su dignidad como persona y estableciendo que ella es más que su trabajo.

La cinta refleja las cotidianidades de Anora y sus compañeras, con las rivalidades y amistades que se forman dentro de su ambiente laboral; es irrelevante el cómo o el por qué llegaron ahí. El enfoque está más bien dirigido a la forma en que se desenvuelven entre ellas, con su jefe y con los clientes. Se nos habla del trabajo sexual desde una perspectiva que rompe con el discurso de la romantización o incluso de lástima que a veces se suele narrar. Al contrario, en un principio se nos presenta a las trabajadoras como chicas que tienen el control de la situación, quienes lideran todo lo que ocurre dentro del club; a pesar de lo que puedan estar sintiendo, se presentan fuertes y seguras, sin quitar la carga de opresión que viven día con día.

Un vínculo inesperado

Eventualmente, Ani conoce a Vanya, un chico de su edad, hijo de una pareja de millonarios, que llega a solicitar su servicio. Rápidamente comienzan a entablar un vínculo que va más allá de lo laboral, de modo que ella se involucra cada vez más en la vida del otro, la cual es una realidad que hasta ese entonces le había sido completamente ajena.

Le toca adaptarse al cambio tan radical que está dando su vida, defendiendo sus principios frente a una comunidad patriarcal y elitista que estigmatiza y minimiza su existencia.

La oposición de los poderosos

Tan rápido como llega la alegría, también lo hacen las adversidades, puesto que la familia de Vanya, al enterarse de este vínculo, se opone inmediatamente. Estos son personajes con mucho poder, que cuentan con la capacidad de modificar las situaciones a su conveniencia con ayuda del dinero y los contactos, desentendiéndose de todo aquello que consideran inferior. Ante esto, Ani se defiende con todo lo que tiene: su dignidad.

Anora es persistente con sus ideales en un ambiente liderado por personas que no solo tienen mayor poder económico, sino que también son casi todos hombres, siendo la excepción la madre de Vanya. Está en una posición de dominación, siendo una mujer joven y trabajadora en uno de los empleos más estigmatizados, invisibilizados y satanizados a nivel social. Ella es consciente de ello, por lo que se pone firme cuando exige que se le reconozca por su relación sentimental con el joven, por sus valores y por la persona que es; busca que se le trate con los derechos básicos que un ser humano merece, que se le visibilice por quien es y no por la etiqueta que se le ha asignado a su profesión.

Debe tratar de hacerle entender a la gente que su estilo de vida no le da el derecho a nadie a tratarla como lo hacen, que su sentir vale. Su trabajo no la define.

Empatía y resistencia

La cinta narra la historia a modo de sátira, presentando las agresiones como chistes pasajeros; sin embargo, a medida que avanza, la comedia adquiere otro sentido.

De esta manera, vamos entendiendo poco a poco las emociones y pensamientos de Ani. Logramos empatizar con sus inseguridades, así como con su impotencia al tratar de hacerse respetar en un entorno que no hace más que ridiculizarla. Ante un sistema que la ha invisibilizado, Anora resiste alzando la voz aunque no la escuchen, complicando las metas e ignorando las peticiones de esta familia que no logra ni intenta visualizarla con el mínimo respeto.

Asimismo, se refleja la hipocresía social cuando se le juzga a ella por ejercer su labor sexual antes que a él por consumirlo.

Ani encarna aquellos cuerpos que muchos desean pero rechazan. La sociedad solo los valora cuando sirven para el consumo de quienes ostentan poder, y los denigra cuando dejan de complacer al otro.

Anora es una película que utiliza la burla para criticar la deshumanización sistemática que existe sobre las trabajadoras sexuales. La protagonista reivindica su derecho a existir y ejercer su libertad, utilizando su coraje como forma de resistencia ante los ideales de quienes tratan de rebajar su valor como persona. Sin embargo, no ignora la carga emocional que conlleva el constante intento de sentirse validada y querida en un entorno en el que le han hecho creer que no lo merece.

Esta película está disponible en ambas cinetecas.

Andi Sarmiento

Me gusta escribir lo que pienso y siempre busco formas de cambiar el mundo; siempre analizo y observo mi entorno y no puedo estar en un lugar por mucho tiempo