Estudiantes del Conservatorio Nacional de Música temen un intento de privatización al interior de la escuela de música y denuncian malas prácticas en el proceso de designación de cargos internos

Texto: Camilo Ocampo

Imagenes: Facebook Sociedad Estudiantil CNM

CIUDAD DE MÉXICO. – Desde el 30 de septiembre, estudiantes del Conservatorio Nacional de Música sostienen un paro de actividades para exigir el cumpliento de más de 60 puntos plasmados en un pliego petitorio dirigido a Claudia Sheinbaum, presidenta de México.

Sus demandas, además, las extienden a Mario Delgado, secretario de educación; Claudia Curiel de Icaza, secretaria de cultura; Alejandra de la Paz Nájera, directora del INBAL; y Mónica Hernández, subdirectora de educación e investigación artísticas.

De acuerdo a los estudiantes, la principal demanda es que se destituya a la actual directora, Silvia Navarrate. Además, exigen que se renueva la dirección con un proceso transparente.

En entrevista para Pie de Página, Ritta Regina, vocal de las maestrías en la Sociedad Estudiantil del Conservatorio Nacional de Música, explica que desde el comienzo de la administración de Silvia Navarrete (2022), se está buscando su destitución, dado que no cumple con la cédula necesaria para representar dicho cargo, como lo plasman los estatutos.

«Consideramos que era necesario mejorar como institución. Hay muchas cosas que nos afectan, no sólo los recortes presupuestales del sexenio pasado, sino también una muy mala gestión por parte de la que en un momento fue puesta como directora interina, y que muy a expensas de la legalidad, fue ratificada en 2022», asegura.

La historia

Silvia Navarrete asumió el cargo de directora luego de un paro con el que se logró la renuncia del exdirector Patricio Mendez debido a antecedentes de acoso sexual.

No obstante, de acuerdo a Ritta, «pese a que se buscó un cambio en temas de acoso y abuso sexual en el conservatorio, y a pesar de ser mujer, en realidad no ha habido muchos cambios en ese tema».

La estudiante asegura que al interior del Conservatorio «sigue habiendo muchas problemáticas». Y afirma que, en realidad, la directora interina «incluso ha hecho contrataciones de maestros  con antecedentes de este tipo de acoso».

Por eso pedían su destitución, pero las autoridades se negaron a escucharles.

¿Amigos del Conservatorio? 

Otra de las demandas principales del estudiantado es que se realice una auditoría externa por parte de la Auditoría Superior de la Federación a la fundación “Amigos del Conservatorio”, la cual tiene como finalidad inyectar capital a la institución y subsanar las carencias que el presupuesto federal no puede proveer.

Dicha fundación fue creada por la actual directora en colaboración con diversos actores políticos y empresariales. Proporcionan fondos y patrocinios privados, por lo que, las personas morales o físicas que hagan una donación, pueden disponer de salas para conciertos realizar eventos sociales en ellas.

De acuerdo a Jose Giovanni, vocal de licenciaturas de la sociedad Estudiantil del Conservatorio, la presencia de esta fundación representa un riesgo:

«Al comenzar a incidir una fundación de este tipo, se corre el riesgo de que pueda comenzar a influir en la normativa interna del conservatorio».

Ritta y José coinciden en que la administración de estos recursos, de la fundación que ya comenzó a operar, deben ser totalmente transparentes y se debe dar seguimiento a la manera en que se destinan.

No hay normatividad para la fundación

José también agrega que existe preocupación entre la comunidad estudiantil. Esto, debido a que en la última reunión que tuvieron con autoridades del Instituto de las Bellas Artes y Literatura (el lunes 21 de octubre), se mencionó que no existe una normatividad en torno al nivel de incidencia que pueden tener este tipo de fundaciones al interior del instituto y el conservatorio. 

«Esto se puede prestar mucho para evasión de impuestos y corrupción, por eso es necesario que todos los procesos sean totalmente transparentes», menciona José.

Y concluye:

«No debemos olvidar que junto con el movimiento muralista, el Conservatorio Nacional de Música fue parte importante de la generación de la mexicanidad, del nacionalismo. Eso está muy conectado a nuestra historia, a nuestros valores como país. Permitir que la privatización llegue hasta la educación es algo que se debe de cuidar mucho, debe recordarse que la educación no es un favor que nos deben de hacer los empresarios, sino un derecho que debe asegurarse».