El pasado 9 de octubre, un primer tribunal en Chiconautla, Estado de México, halló a Jesús culpable de abuso sexual y lo sentenció a 21 años. Hasta la fecha no ha sido dado de baja del Ejército, denuncia su ex esposa
Por Lydiette Carrión / X: @lydicar
El teniente coronel Jesús N.N. fue sentenciado a 21 años por abuso sexual en contra de sus dos hijas cuando ellas eran menores de edad. Sin embargo, continúa activo en el Ejército.
Jesús es médico militar. Cometió violencia psicológica y física contra Erika quien fuera su esposa. Luego, el 16 de diciembre de 2020, Jesús abandonó a su mujer y la dejó en Jalisco, donde residía la familia. El militar se llevó a sus dos hijas de entonces 12 y 17 años a la ciudad de México y llegó a vivir con su madre (la abuela paterna de las niñas).
Erika por su parte, fue dejada atrás. Ni siquiera entendía qué había pasado. Debió cerrar un negocio que mantenía y vender cosas para seguir a sus hijas. Esto le llevó seis meses, y después los alcanzó en el área metropolitana de la Ciudad de México. Erika buscó ayuda con su familia en el Estado de México para estar cerca de las niñas.
Para entonces Jesús la había bloqueado de redes sociales y rompió toda comunicación con ella, le impedía ver a sus hijas y la amenazaba advirtiéndole que tenía amigos generales.
Por todo esto, por las amenazas, Erika pidió ayuda en la Secretaría de Defensa Nacional. Pero en ninguna oficina le hicieron caso. Alegaron que el caso era del fuero común y no podían hacer nada. Mientras tanto, Erika permaneció sin poder hablar con sus hijas y mucho menos verlas, así que inició un juicio de guardia y custodia.
Para abril de 2022, Jesús se mudó a la ciudad de Hermosillo, Sonora, y dejó a las niñas con la abuela paterna, quien tampoco le permitió a Erika acercarse a sus hijas. Dos meses después Erika ganó el juicio por la guardia y custodia, pero la abuela paterna le impidió llevarse a sus hijas. Además la mayor ya había cumplido 18 años.
“Llegamos hasta con policías y nadie pudo hacer nada”, dijo en su momento.
En noviembre de aquel año, la hija menor, que ya contaba con 14 años, se puso en comunicación con ella y acordaron encontrarse en la escuela a la que ella asistía. Sólo así Erika pudo recuperarla. Poco después su hija le explicó lo que habían vivido: abuso sexual por parte de su padre y en complicidad con la abuela paterna.
Como se narró en este espacio, el 7 de enero de 2023, Erika y su hija interpusieron una denuncia por abuso sexual agravado en contra de una menor de edad ante un tribunal civil. El agresor fue detenido en abril del mismo año. Durante todo este tiempo Jesús ha seguido siendo teniente coronel en activo. El pasado 9 de octubre, un primer tribunal en Chiconautla, Estado de México, halló a Jesús culpable y lo sentenció a 21 años.
Hasta la fecha no ha sido dado de baja del Ejército.
Lydiette Carrión Soy periodista. Si no lo fuera,me gustaría recorrer bosques reales e imaginarios. Me interesan las historias que cambian a quien las vive y a quien las lee. Autora de “La fosa de agua” (debate 2018).
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