En la Feria Internacional del Libro de la Ciudad de México Alberto Nájar destacó que tenemos una historia larga de violencias en México que se ha multiplicado por muchos factores, pero que se ceba en los más pobres

Texto: Kau Sirenio

Fotos: Alexis Rojas

CIUDAD DE MÉXICO. – En el segundo día de la FIL, en el foro Ricardo Flores Magón, dos periodistas y una académica debaten sobre como enfrentar la violencia en México: la investigadora de la Universidad de Texas, Guadalupe Correa; el escritor y periodista, José Reveles; y Alberto Nájar, editor de Pie de Página y presidente de la Red de Periodistas de a Pie.

Ante un foro abarrotado, los periodistas cuestionan la narrativa de violencia instaurado en la esfera del poder desde hace 30 años. Reveles centró su análisis en la violencia perpetrados por el crimen organizado y lo enlazó con los hechos violentos en el municipio de San Miguel Totolopan, Guerrero, destacando la diferencia entre la realidad y las percepciones.

“La violencia en contra de los de abajo es más encarnizada”, dijo, por su parte, Alberto Nájar, quien sostuvo que culpar al narco «es un buen pretexto para no hacer nada y para mantener este sistema de violencia».

Destacó que en México tenemos una historia larga de violencias, que se ha multiplicado por muchísimos factores,, entre ellos, la prensa. Se refirió al tratamiento que dan los medios al caso Ayotzinapa como parte de una estructura criminal del Estado que se ceba sobre la gente más vulnerable. «Si a Peniley o a cualquier a de estos periodistas les cayera el expediente de un asesinato de un potentado ¿publicaría con ese detalle? Yo creo que no. Lo hacen porque lo pueden hacer, porque son parte de este sistema represor que se ceba entre los más pobres».

La guerra por las narrativas

Mientras que la académica, Guadalupe Correa aseguró que la guerra que vivimos «no es contra la droga, sino por los recursos naturales”.

Dijo que el caso Ayotzinapa fue un crimen de Estado, pero tampoco se puede construir con esa narrativa porque, no todo está podrido, no todo está dañado: “No podemos decir que el Ejercito está dañado y que no haya una sola institución honesto. La narrativa del poder económico va encaminado a decirlo que nada sirve y que necesitamos una intervención extranjera para resolverlo” cuestionó.

Una piedra en el zapato

También se habló sobre el fiscal General de República, Alejandro Gertz Manero. Al respecto, el editor de Pie de Página destacó que “la piedra en el zapato del presidente es el fiscal de la República. Lo sacaron de la catacumbas del plan Cóndor. Él no sabe de la justicia, sino de violencia”.

Luego retomó: No podemos entender que se haya multiplicado la violencia hacía las mujeres, o las violencias ancestrales a los pueblos indígenas. Es la misma que se reproduce hoy en día, porque no es solo la droga, sino la estructura del Estado criminal que está teniendo muchas resistencias para cambiar.

No hay que olvidar que en este lugar el gobierno federal desalojó a los maestros que protestaban contra una reforma educativa con un helicóptero black hawk”, dijo, en referencia al desalojo de maestros en el sexenio de Enrique Peña Nieto.

El también conductor del noticiero Momentum recordó el pasado de la Dirección Federal de Seguridad (DFS): “No hay que olvidar que los delincuentes eran pastoreados por la DFS. En Guadalajara los narcos eran resguardado por los militares. Es es la historia de violencia que tenemos, pero no hemos sido capaces de pararlo porque la impunidad que impera en la procuración de justicia”.

José Reveles aprovechó la critica a la ola de violencia para agregar un poco más de condimento al debate que subió de calor en el Foro Ricardo Flores Magón: «La operación Cóndor lo comandaba Alejandro Gertz Manero en el triángulo dorado de la droga: Sinaloa, Chihuahua y Durango zona que padeció de desapariciones forzadas de estudiantes y guerrilla”.

“Alberto Najar -agregó-, tiene razón cuando habla de piedra en el zapato del Presidente Andrés Manuel López Obrador. No es para menos. Porque el fiscal tienen una trayectoria oscura en la historia de México. Pero la violencia la tenemos que enfrentar en la medida de que cambiamos la narrativa”.

Más allá de Netflix

Es importante entender que el narcotráfico funciona igual que cualquier empresa.

“Tienen la misma estructura empresarial de distribución, llevan su producto hasta la calle más chiquita de cualquier lugar: metanfetaminas, Coca Cola y cerveza. Funcionan igual y si no entendemos esto no podemos tampoco combatir la violencia, porque tenemos que verlo más allá de las historias de Netflix”, agregó Nájar, poniendo el dedo en la llaga.

Llamó a pensar la violencia fuera de la caja y evitar la fascinación por las historias de narcos, porque cuando una sociedad normaliza su convivencia y acepta su existencia, lo que sigue es aceptar los discursos sobre el control social de la derecha.

Una hora después Alberto Najar regresó al foro acompañado con Ernesto Ledesma para hablar de Momentum. Charla que fue acogido por el público con aplausos.

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