Registro civil: corrupción

4 agosto, 2022

Tatyi savi

En un estado como Guerrero con poblaciones indígenas los requisitos para obtener un acta de nacimiento para un adulto mayor son hasta vergonzosos, porque históricamente las comunidades y pueblos indígenas se rehusaron a inscribirse ante el Estado que les arrebató su identidad, tierra, cultura y libre determinación

Twitter: @kausirenio

En Guerrero tramitar el registro de una persona adulta, corregir un error en el acta de nacimiento o matrimonio civil es recorrer ríos y montañas para reunir cada uno de los requisitos que la dependencia pide para tal fin, a veces el trámite es de muerte, suicidio o divorcio. Este proceso genera corrupción en la oficina de la Coordinación Técnica de Registro Civil del gobierno de Guerrero.

En un estado con poblaciones indígenas los requisitos para obtener un acta de nacimiento para un adulto mayor o adulto joven son hasta vergonzosos para el gobierno de Guerrero, porque históricamente las comunidades y pueblos indígenas se rehusaron a inscribirse ante el Estado que les arrebató su identidad, tierra, cultura y libre determinación.

El trámite no es problema, ni siquiera genera conflicto sino el papeleo que requieren para algo tan sencillo: registrar y corregir datos de actas de nacimiento de personas de más de cuatro años: “Constancia de alumbramiento. Acta de nacimiento de los padres. Acta de matrimonio (si son casados). Credencial de elector de los padres. Dos testigos (con credencial de elector)”.

Requisitos para registro extemporáneo de adultos mayores (gratuito): “Constancia de inexistencia del lugar donde nació. Constancia de inexistencia del lugar donde radica. Carta de pobreza y radicación. Copias de acta de nacimiento de hijos y hermanos. Copia de acta de matrimonio. Copia de acta de bautizo. Copia de credencial de elector. Copia de comprobante de domicilio”.

En el primer caso es razonable los requisitos se pide para generar la identidad para los menores, sobre todo, porque vivimos en un país que permitió el robo y tráfico de menores. Primero en la Guerra Sucia y después la corrupción de los funcionarios del Registro civil que permitió la venta de niñas y niños robados o arrebatados de los insurgentes de los años 70, 80 y 90. 

Ante la ola de violencia Guerrero, centenares de niñas y niños se quedaron sin padres biológicos, por lo tanto sin identidad en alguno de los casos. O se encuentran fuera de Guerrero por temor a ser identificados. ¿Con qué dinero pagarían estos niños la corrección de sus acta de nacimiento? ¿Cómo comprobarían estas niñas y niños su identidad si no pueden reunir los requisitos que les pide?

¿Qué hace el Estado para acompañar a estos niños? ¿Cómo los inserta a la educación? ¿Qué derecho se les reconoce? Son algunas preguntas que nos llevan a saltar a otro conflicto.

La crítica sobre la identidad se centra en el requisito que se les pide a las personas mayores. ¿Es admisible que se les requiera tantos papeleos a esta persona que es reconocida en una comunidad?, se supone que es reconocido por su trabajo comunitario. 

El conflicto no es la identidad sino la negación del Estado de garantizar derechos básicos de las personas como la salud, educación, identidad, cultura, deportivo y económico. 

Lo que se plantea es reconocer los derechos humanos de las personas sin identidad para que puedan acceder a servicios de salud sin importar su estatus migratorio. Lo que importa son las condiciones humanas. 

Periodista ñuu savi originario de la Costa Chica de Guerrero. Fue reportero del periódico El Sur de Acapulco y La Jornada Guerrero, locutor de programa bilingüe Tatyi Savi (voz de la lluvia) en Radio y Televisión de Guerrero y Radio Universidad Autónoma de Guerrero XEUAG en lengua tu’un savi. Actualmente es reportero del semanario Trinchera.