La “traición a la patria” de Calderón

21 marzo, 2021

El tema de volver a una soberanía energética es la gran batalla del gobierno de AMLO. Llama la atención que la denuncia sea impulsada por este grupo oaxaqueño, afín sí a AMLO, pero de alguna manera alejado del reflector en la Ciudad de México

@lydicar

Es un documento de 20 cuartillas, dirigido al delegado de la Fiscalía General de la República en Oaxaca. Ahí, Flavio Sosa y César Mateos denuncian al expresidente Felipe Calderón, primero, por traición a la patria, y luego por terrorismo. 

El primer cargo, argumentan, se debe al actuar de Felipe Calderón desde que fue secretario de Energía, y ya como presidente de la República. Primero, entre 2003, 2004, cuando era secretario de Energía durante el sexenio del panista Vicente Fox, impulsó que la Comisión Federal de Electricidad se encogiera, para dar paso a la energía proveniente de empresas de capital privado, particularmente extranjero. 

Denuncian: “entre 2003 y 2004, Felipe Calderón litigó en contra de los intereses de la nación y a favor de los intereses de empresas generadoras de energía eléctrica, particularmente Iberdrola”.

El Informe del Resultado de la Revisión y Fiscalización Superior de la Cuenta Pública de 2002 –de la Auditoría Superior de la Federación de marzo de 2004–, advierte: 

“La participación en la capacidad de generación de energía eléctrica de la Comisión Federal de Electricidad disminuyó respecto del total del Sector energético Nacional”. 

Para 2002, su participación era del 80.7 por ciento, y seis años después, en 2008, era del  68.6 por ciento. Y añade: “Se estimó que la CFE dejó de percibir 140.7 millones de pesos por concepto de porteo y 18.0 millones de pesos por respaldo de energía eléctrica durante el periodo 2000-2002, debido a que los cargos y tarifas que aplicó a los Autoabastecedores y Cogeneradores fueron menores a sus costos medios contables”.

La denuncia continúa, advierte que la ASF halló que la inmensa cantidad de contratos otorgados a empresas de energía eléctrica desde 1992 eran insostenibles. Y aunque Calderón Hinojosa no era secretario al momento de estos contratos, sí litigó a favor de las empresas (y no de la CFE) ya como titular de esa Secretaría. 

Llevó el caso incluso hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación, protegiendo a empresas españoles. Por cierto, el máximo órgano del poder judicial falló a favor de las empresas, al concluir que la ASF no tenía facultades para investigar corrupción anterior a 2002.

No sólo los defendió y litigó en su favor. Sino que siguió favoreciéndolos.

“Iberdrola empezó a recibir contratos y canonjías del gobierno desde que Felipe Calderón era Secretario de Energía en la administración de Vicente Fox, mediante el otorgamiento de permisos para generar, transmitir, distribuir y comercializar energía eléctrica, todas ellas actividades que, según el artículo 27 constitucional, eran actividades exclusivas del Estado.”

Ya como presidente de la República, continúa la denuncia, Calderón benefició prolíficamente a Iberdrola y otras empresas rusas y españolas. 

La denuncia no lo menciona, pero fue justo Calderón Hinojosa quien firmó un decreto para extinguir a la Compañía Luz y Fuerza del Centro, el último bastión de energía pública del país; sostenido por uno de los sindicatos más beligerantes. 

La denuncia tampoco menciona el papel de Juan Camilo Mouriño, quien fue secretario de Gobernación del gobierno Calderonista, en atraer aún más compañías españolas.  Mouriño recibió acusaciones severas sobre negocios ilícitos en el sector energético, desde 2006 que tomó posesión como secretario de Gobernación, hasta 2008, cuando falleció en un accidente aéreo. 

El tema de volver a una soberanía energética es la gran batalla del gobierno de AMLO. Llama la atención que la denuncia sea impulsada por este grupo oaxaqueño, afín sí a AMLO, pero de alguna manera alejado del reflector en la Ciudad de México. Incluso el hecho de haber sido presentada en la delegación de Oaxaca y no directamente en la FGR, es una acción un poco tímida, o silenciosa. 

Habrá qué ver qué curso sigue… 

Lydiette Carrión Soy periodista. Si no lo fuera,me gustaría recorrer bosques reales e imaginarios. Me interesan las historias que cambian a quien las vive y a quien las lee. Autora de “La fosa de agua” (debate 2018).