Durante la primera mesa de diálogo con funcionarios de gobierno, indígenas de Pantelhó declararon su municipio libre de alcohol y drogas, y reiteraron sus demandas: detención de grupos de narcotraficantes, investigación de funcionarios municipales acusados de estar vinculados con la delincuencia y reconocimiento de autoridades del sistema normativo indígena

Texto y fotos: Ángeles Mariscal / Chiapas Paralelo

CHIAPAS.- Casi un mes después que habitantes del municipio indígena de Pantelhó formaron un grupo de autodefensa contra las acciones del crimen organizado, representantes de los gobiernos estatal y federal acudieron a la localidad ubicada en la zona Altos de Chiapas, para escuchar los planteamientos de los pobladores.

Durante la primera mesa de diálogo con funcionarios de gobierno, los indígenas anunciaron que no se permitirá la venta y consumo de enervantes en la región, declararon a su municipio libre de alcohol y drogas, y reiteraron sus demandas: detención y desarticulación de grupos de narcotraficantes, investigación de funcionarios municipales a los que acusan de estar vinculados con la delincuencia organizada; y reconocimiento a autoridades nombradas por el sistema normativo indígena.

La reunión se logró con la intermediación de una comisión de mediación formada por religiosos y religiosas de la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas; tuvo como testigos al Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas y observadoras internacionales.

Por parte del gobierno federal participó la comisionada para el Diálogo con los Pueblos Indígenas, Josefina Bravo; un diputado del Congreso local que acudió a título personal, y funcionarios de segundo nivel que trabajan en la Secretaría de Gobierno de Chiapas.

Los funcionarios del gobierno escucharon los planteamientos de los pobladores de Pantelhó, quienes partieron de una primera exigencia de fondo, “que el gobierno reconozca que en Pantelhó hay un problema, que es la existencia de un crimen organizado en el ayuntamiento”.

Explicaron esta situación ocasionó el tráfico de drogas, armas, personas en el municipio, y el asesinato -dijeron- de unas 200 personas que se opusieron a los grupos delictivos. Exigieron justicia por estos crímenes, aún cuando a la reunión no asistió ningún representante de las fiscalías federal y estatal, encargadas de la investigación.

También entregaron una petición a la Auditoría Superior de la Federación, para que fiscalice los recursos públicos que ejercieron las autoridades municipales de Pantelhó, porque existe la presunción de que los recursos fueron utilizados para la compra de armas utilizadas por grupos criminales.

En este contexto exigieron la renuncia de la presidenta municipal actual, Delia Yanet Velazco Flores; y que no sea reconocido a su esposo; Raquel Trujillo Morales, como presidente municipal electo. Sobre la elección de Raquel Trujillo, explicaron que en el proceso del 6 de julio, los pobladores fueron obligados a votar por él, bajo amenazas de muerte y vigilancia de personas armadas en las urnas.

Los representantes de la población de Pantelhó anunciaron que las 86 comunidades rurales y los pobladores de los 18 barrios de la cabecera municipal acordaron nombrar  nuevas autoridades bajo el sistema normativo indígena de usos y costumbres.

“El acuerdo tomado fue que aquí en Pantelhó ya no tendrán lugar para gobernar los malos ayuntamientos, y el 1 de octubre tendremos nuestra nueva autoridad electa de manera libre por el pueblo”, dijo Pedro Cortés López, coordinador de los 20 comisionados para el diálogo.

Por su parte, al término de la reunión que duró cuatro horas, en entrevista, Josefina Bravo dijo que escucharon los planteamientos de los pobladores, que se instalarán “mesas temáticas” para atenderlos, y que cada institución deberá dar respuestas de acuerdo a sus competencias.

El diputado local Omar Molina Zenteno, quien acudió a la reunión a título personal, dijo que entregará a sus homólogos del Congreso la petición de destitución de la alcaldesa actual, y del alcalde electo. 

En entrevista luego del encuentro, el coordinador de asesores de la Secretaría de Gobierno, Leonel Reyes, reconoció que desde meses atrás de la conformación de las autodefensas y las acciones que emprendieron para expulsar a las personas acusadas de vínculos con la delincuencia, recibieron en diversas ocasiones las denuncias y peticiones de la población de Pantelhó; “pero no se le pudo dar la atención deseada”. Dijo que ahora “es una gran oportunidad para que las cosas se hagan bien”.

Los funcionarios de gobierno se comprometieron a regresar al municipio en 3 días, con respuestas concretas  a las peticiones de la población de Pantelhó. Los habitantes del lugar dijeron que buscan una salida pacífica e institucional a sus demandas, y que en tanto eso suceda, se mantendrán en la cabecera municipal con el apoyo del grupo de las autodefensas “El Machete”.

Esta nota fue realizada por CHIAPAS PARRALELO, integrante de la alianza de medios de la Red de Periodistas de a Pie.