«Hey, muchacha, te quiero sacar unas fotos»

En 1967, Mario Mutschlechner, un fotógrafo alemán al que llamaban «gringo», llegó a la remota zona mixteca de la Costa Chica oaxaqueña. Ahí fotografió a una niña con los pechos desnudos, como las mujeres solían ir. A 50 años, esta es la historia de aquella niña y aquel «gringo».