Luego de la jornada violenta del fin de semana, unos dos mil pobladores de municipios cercanos a Chilpancingo tomaron este lunes la capital guerrerense presuntamente demandando seguridad, horas más tarde las autoridades informaron que los actos fueron organizados por grupos afines a Los Ardilos. Los manifestantes detuvieron a policías y funcionarios, irrumpieron en las sedes del Congreso y la gubernatura. El miedo provocó suspensiones de transporte y clases